Netline proporciona a las autoridades penitenciarias herramientas eficaces, fiables y probadas para controlar el uso ilícito de teléfonos móviles introducidos de contrabando por los reclusos, quienes los utilizan para comunicarse con el exterior, planificar operaciones criminales y terroristas, obstruir investigaciones, coordinar intentos de escape y motines, y amenazar a los guardias y civiles inocentes.
El dominio del espectro en las instalaciones correccionales es una misión compleja cuya eficacia está determinada por dos elementos principales: la potencia y la fuerza de transmisión de los inhibidores y la arquitectura de despliegue de los sistemas a lo largo de la prisión.
El despliegue de inhibidores de señal celular y Wi-Fi en prisiones requiere un conocimiento y experiencia extensos para diseñar e instalar sistemas de interferencia que demuestren una cobertura efectiva y, al mismo tiempo, prevengan interferencias de radiofrecuencia (RF) fuera de los muros de la prisión.
La solución de interferencia C-Block de Netline ha estado operando desde 2003 y se ha desplegado con éxito en instalaciones penitenciarias de todo el mundo. El proceso comienza con una encuesta completa del sitio y sistemas diseñados a medida para cada prisión para optimizar la cobertura y minimizar la fuga de señales e interferencias fuera de los límites de la instalación. Se tienen en cuenta cuidadosamente los requisitos locales de seguridad radiológica.
El C-Block se basa en un gabinete modular que transmite señales de interferencia RF a través de antenas estratégicamente posicionadas para negar la recepción celular en un área controlada. Cada módulo es una unidad independiente y ligera, empaquetada por separado para fines de reparación y mantenimiento rápido y actualizaciones futuras de bandas de frecuencia.
El sistema C-Block contiene múltiples gabinetes de interferencia desplegados en la instalación y está diseñado para operar 24/7 en condiciones ambientales adversas y resistir posibles intentos de destrucción.
Las frecuencias y salidas de potencia por segmento de interferencia se planifican cuidadosamente, lo que permite una menor salida de energía por segmento con mayor flexibilidad en la distribución de la cobertura y una fuga significativamente menor.
Además, mientras que otras soluciones para prisiones pueden bloquear solo la comunicación celular, el C-Block admite múltiples bandas de frecuencia y alta potencia de transmisión, bloqueando protocolos de comunicación adicionales y dispositivos como Wi-Fi, teléfonos satelitales y otros dispositivos.
El sistema es gestionado por la aplicación de control patentada de Netline, el NCC. Esta herramienta de gestión y control es la interfaz principal de la solución C-Block para el usuario final e incluye informes de estado, alarmas de audio de fallos y registros de eventos. El personal autorizado puede monitorear, gestionar y controlar fácilmente los gabinetes de interferencia.
Principales características del NCC:
En casos con una red estatal de instalaciones, el Centro de Control de Netline puede gestionarlas todas a través de una única estación de trabajo. Un mapa interactivo ofrece a los usuarios una visión general de todas las instalaciones en la red y su estado y alertas correspondientes. El mapa también permite acercarse a cualquiera de las instalaciones en la red para obtener una vista más detallada.
Los niveles de autorización y permisos pueden adaptarse para permitir el control remoto de los sistemas de interferencia en las instalaciones si el cliente lo requiere.